domingo, 6 de enero de 2013

Ser chef

Ser chef Me han preguntado tantas veces sobre mi profesión que ya he perdido la cuenta; que si es fácil, que si es divertido, que si es chévere, que si da plata, en fin tantas cosas que creo que la gente no sabe cuáles deben ser las verdaderas motivaciones de estudio. Mi mamá estuvo tan acertada o los padres actuales no dan una correcta guía a sus hijos? Recuerdo cuando me decía; “hijo, si vas a ser zapatero, pues sé el mejor de ellos”, creo que es la mejor muestra de apoyo a mis ideales que pude recibir de ella, heme aquí un gastrónomo feliz, y ¿por qué digo gastrónomo en lugar de chef? Porque eso somos, somos gastrónomos, llámese administradores, ingenieros, licenciados o como el título de su Universidad o institución lo diga, pero de gastrónomo a chef hay una gran diferencia. Un chef es aquel tipo que se dedica a “gerenciar” una cocina, sea esta de hotel, restaurante, catering o cualquier lugar donde exista una cocina profesional, por ello ese puesto de trabajo se le otorga a aquella persona que tenga experiencia en diseño de platillos nuevos, costos, nutrición, manejo de personal, y demás competencias que aumentan según la organización que busque a tal “chef” y a más exigencia mayor sueldo, mayor trabajo, mayor stress, mayores broncas etc etc etc. Un gastrónomo es la persona que estudia la gastronomía –obviando que se entiende que es una ciencia- y a esta ciencia la que estudia varios componentes culturales tomando como eje central la comida, así que todo aquel que cree que esto de ser cocinero es cosa fácil le recomiendo que entre a una cocina de verdad una semana antes de gastar su dinero y darse por vencido en poco tiempo, porque si puedo decir algo –sin querer ser machista- es que la cocina, al contrario de lo que decían los viejos rabo verdes de mi país, es para hombres, leyó bien, para hombres, o para mujeres que se olviden que existe una barrera entre géneros y esté dispuesta a trabajar sin maquillaje, sin que le den haciendo las cosas que son “muy duras” y sin dejarse llevar por sus días y en eso quiero aclarar que deberían estar dispuestas a ser las mismas aunque sus hormonas luchen por quitarles el control. Ahora que algo ha quedado claro en cuanto a diferenciar entre un gastrónomo y un chef, le invito a probar un empleo cualquiera que este sea, de cualquier carrera, sólo así sabrá si en verdad está hecho para lo que cree que valdría la pena invertirle 5 añitos de su vida para prepararse, quien quita y logre descubrir a un Adi Dassler en potencia dentro suyo …..

No hay comentarios:

Publicar un comentario